RESEÑA DE LA REVISTA FRANCESA "LE PELERIN" SOBRE EL NOMBRAMIENTO DE PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA DOMINICANA DEL ARZOBISPO ADOLFO NOUEL BOBADILLA
Le Pelerin, 9 de Marzo de 1913.
S. G. Monseñor NOUEL
Presidente de la República de Santo Domingo
La República de Santo Domingo, habiendo sido presidida en
1880 por su Arzobispo Monseñor Merino, viene de nuevo a elegir a su sucesor, Monseñor Nouel, para las mismas
funciones. El 23 de Febrero último, Su
Excelencia, Raymond Pichardo, enviado especial y Ministro plenipotenciario de
Santo Domingo, notificaba oficialmente al Papa la elección del prelado.
Esta elección fue el resultado de los esfuerzos de los comisionados
americanos, el general de Brigada Mac Intyre y M. W. Doyle, funcionarios los
dos de la división para los Asuntos de América Latina. Su acción ha sido
apoyada por el “gran tutor” de la República Dominicana, el gobierno de
Washington, que considera la elección realizada marcando el fin de la
revolución y de los conflictos de frontera con la República de Haití.
Aunque la religión católica es reconocida como religión de
Estado, en Santo Domingo, todas las otras confesiones gozan allí de los mismos
derechos. La población que cuenta con 673.000 habitantes, comprende alrededor
de 600. 000 católicos.
Monseñor Nouel era el único candidato de compromiso para el reemplazo
del anterior presidente Victoria, que abdicó en favor del Arzobispo, al que
consideraba como el único capaz de reestablecer la paz pública. Es por estas
razones que Pio X ha autorizado a Monseñor Nouel a tomar las riendas del
gobierno de Santo Domingo.
De hecho, la elevación del Arzobispo al más alto cargo
público ha producido el efecto esperado: los partidos que se desgarraban han hecho
la paz completa, abandonando voluntariamente las armas y terminando toda guerra civil.
(traducción libre de E. Nouel V.)